Combustibles: YPF sube 2,5% y el campo enfrenta otro desafío para su rentabilidad

Combustibles: YPF sube 2,5% y el campo enfrenta otro desafío para su rentabilidad

La petrolera estatal YPF aplicó este domingo un incremento del 2,5% en el precio de los combustibles, reactivando su política de “precios dinámicos” y sumando presión sobre un agro que ya enfrenta márgenes ajustados, alta volatilidad y dificultades logísticas.

El aumento —moderado en comparación con otros ajustes recientes— se suma a una escalada acumulada superior al 50% en lo que va del año, lo que complica la planificación y los costos operativos de productores, contratistas y transportistas rurales en plena campaña agrícola.

El gasoil, insumo estratégico con impacto directo

En la agricultura, el gasoil no es simplemente un insumo más: su precio incide directamente en cada etapa del ciclo productivo. Desde la siembra y la cosecha hasta el transporte de granos, maquinaria e insumos, cualquier variación en su costo impacta sobre la rentabilidad del productor.

En el caso del sector granario, donde la cosecha gruesa aún define rindes y márgenes, el nuevo aumento del combustible profundiza la presión económica. A esto se suma un contexto de precios internacionales deprimidos y un mercado interno con limitada disponibilidad de financiamiento.

Precios dinámicos: ¿más incertidumbre para el agro?

YPF justificó el ajuste en el marco de su nuevo esquema de precios dinámicos, administrado por su Centro de Monitoreo en Tiempo Real (RTIC), una plataforma que permite modificar tarifas según demanda, zona geográfica y franjas horarias.

Para el agro, esta estrategia introduce una variable más de incertidumbre. La posibilidad de subas regionales o repentinas preocupa especialmente a los pequeños y medianos productores, quienes advierten que sin un sistema de comunicación clara ni medidas de compensación, se complica aún más una actividad que necesita previsibilidad para operar.

Respuestas del sector: asociativismo y eficiencia

Frente a este escenario, muchas cooperativas agropecuarias y consorcios de productores están reactivando estrategias de compras conjuntas para negociar mejores condiciones con proveedores. También crecen las inversiones en tecnologías que aumenten la eficiencia, como logística propia, agricultura de precisión, monitoreo satelital y telemetría de combustible.

Estas medidas buscan amortiguar el impacto del aumento del gasoil sobre los costos unitarios, especialmente en zonas alejadas, donde el precio del flete ya representa una proporción significativa del costo total.

¿Se sumarán otras petroleras?

Todo indica que otras compañías como Shell, Axion y Puma podrían acompañar el movimiento de YPF en las próximas horas. Si eso sucede, el ajuste sería generalizado y afectaría por igual a todo el sector, independientemente del proveedor.

El impacto sería especialmente fuerte en regiones alejadas de los grandes centros de distribución, donde los sobrecostos logísticos se combinan con una menor oferta de alternativas para cargar combustible.